Otro giro en la saga que es la colaboración entre The Pokemon Company y el Museo Van Gogh llegó cuando un informe alega que los empleados del museo han sido suspendidos por robar tarjetas y violar el código de conducta.
La colaboración de Pokémon con el Museo Van Gogh incluyó la muy solicitada inclusión de la tarjeta Pikachu con sombrero de fieltro gris. Si bien la colaboración fue una nueva y emocionante empresa para la comunidad de JCC Pokémon, la situación rápidamente se convirtió en una locura cuando los revendedores y revendedores llegaron a la escena.
Si bien el evento en persona estuvo plagado de disturbios cuando las personas corrieron para conseguir tarjetas y objetos coleccionables de la colaboración, fueron igualmente difíciles de conseguir en línea, lo que aumentó la exclusividad de los artículos.
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Parece que los empleados del Museo Van Gogh supusieron rápidamente la demanda que tendrían estos artículos y violaron varias reglas que ahora han llevado a su suspensión. Un informe del medio de comunicación holandés Het Parool detalla la mala conducta.
Cuatro empleados del Museo Van Gogh fueron suspendidos después de una mala conducta en la exhibición de Pokémon (a través de Parool) https://t.co/JYRyPT6Ktz
Un empleado malversó una caja entera de tarjetas Pokémon, mientras que otro informó a los invitados sobre el momento exacto en que se podían comprar los boletos.
-Daan Koopman (@NintenDaan) 24 de enero de 2024
Traducido al inglés, el artículo explica que “A mediados de diciembre, al menos cuatro empleados del Museo Van Gogh fueron suspendidos debido a su comportamiento durante la exposición de Pokémon”.
Luego, el artículo entra en los supuestos detalles que resultaron en las suspensiones. El medio afirma que varios empleados, incluido un individuo titular que había trabajado allí durante 25 años, «informaron a los visitantes de varias maneras sobre cuándo podían comprar entradas».
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Esto es una violación del código de conducta del Museo Van Gogh, ya que los empleados proporcionaron a amigos y familiares información sobre cuándo y cómo se venderían las codiciadas tarjetas.
Quizás la revelación más impactante del informe de Het Parool fue que «un empleado supuestamente malversó una caja de tarjetas Pokémon». Dada la naturaleza del evento y la exclusividad de los artículos en venta, el museo sintió la necesidad de suspender a varios empleados por su comportamiento.
El informe confirmó que los empleados serían relevados de sus puestos: “Cuando se le preguntó, un portavoz aclaró que los empleados no regresarán al museo”.
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La exposición Pokémon de Van Gogh ha presentado varios giros y vueltas, y el último se suma al escándalo. No se sorprenda al escuchar más casos similares a medida que los revendedores continúan su intento desesperado de asegurar estos artículos.
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